8ª Sesión: Injertos

De vuelta a pie de campo, en esta sesión nos ponemos manos a la obra para comenzar con la plantación de algunas hortalizas en nuestros bancales destinados para nuestra pequeña huerta convencional. Entre todos abordamos la labor de plantar las judías pintas en el terreno destinado a ello, que previamente había sido acondicionado para ello. Manu nos explica por qué es necesaria la estructura en forma de esqueleto de tienda de campaña, ya que por ahí crecerá y se enroscará la planta de la judía. También observamos como de unas "conchas" de patata consiguen enraizar y generan una nueva planta de patata. Manu nos las tenía preparadas y listas para observarlas con detenimiento, analizando sus raíces y viendo cómo las pequeñas patatas ya van asomando en forma de engrosamiento de las propia raíz. Aprovechamos para recordar que de las plantas podemos comernos cualquier parte. Hay plantas de las que comemos su hoja, en otras lo que comemos es su fruto, en otras su flor, en otras su tallo y en otras su raíz, como es el caso de la patata.

 

Observamos también las lechugas recién plantadas y las habas, todavía minúsculas.



Después nos encaminamos a la parte de arriba de la finca, donde Manu y Bárbara nos explican lo fácil que es crear comederos para los pájaros y echamos un vistazo a los que hay colocados en varios puntos de la finca. Los pájaros también se pueden convertir en plaga, pero también nos pueden ayudar a acabar con determinados "bichitos" y si les tenemos ocupados comiendo las golosinas que les tenemos preparadas, puede que se olviden de comerse nuestros deseados frutos.

Tras esto, asistimos a una clase teórica por parte de Manu de lo que son los injertos y los diferentes tipos que se pueden hacer. Después de la necesaria teoría viene lo que más nos gusta, que es la práctica. Utilizando unas ramas previamente acondicionadas por Manu, los alumnos experimentan la sensación de convertirse en auténticos horticultores y llevar a cabo actividades tan sofisticadas como son los injertos. Cuando volvamos comprobaremos si nuestro esfuerzo tiene recompensa en forma de injerto que ha agarrado y echa brotes. Crucemos dedos.